Tyson Fury derrotó a Francis Ngannou, luchador de MMA, en pelea en Arabia Saudita

Francis Ngannou le aguantó 10 asaltos al mejor peso pesado del box contemporáneo. Lo golpeó bastante e incluso lo mandó a la lona de un puñetazo.

Si la pelea fuese en MMA ¿Cuantos asaltos hubiera aguantado Tyson Fury?

Te lo adelanto... Francis lo asesina.#FuryvsNgannou pic.twitter.com/H9S6lwuX1k

— Anticomunista Digital. (@DigitalChilean) October 28, 2023

"Es un hombre muy incómodo, un buen pegador y le respeto mucho", dijo Fury, que calificó el combate como "probablemente uno de los más duros" que ha tenido en una década.

El británico era claramente favorito ante el camerunés, novato en el boxeo.

"Soy una bestia herida, pero no derrotada (...) Era mi primer combate de boxeo, gran experiencia. No doy ninguna excusa", dijo Ngannou en una entrevista al lado del cuadrilátero.

"Sé que me quedé corto. Voy a volver y a trabajar más duro (...) Ahora sé que puedo hacer esto", agregó.

Fury saltó a por todas en el primer asalto con duros golpes de derecha, pero sufrió un corte en la frente en el segundo y pareció especialmente débil en el tercero después de caer a la lona.

Las últimas rondas se aletargaron por el cansancio de ambos, incapaces de lanzar un golpe decisivo.

"No sé cómo de apretado estuvo, pero me llevé la victoria", celebró Fury. "Juego limpio para Francis, que me cortó la cabeza aquí. Fue una buena pelea", agregó.

- "Un largo descanso" -

El cinturón del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) de peso pesado de Fury no estaba en disputa en este combate en la capital saudita presentado como la "Battle of the Baddest", la batalla de los más malos.

Las autoridades sauditas confían que el evento ayude a impulsar el reino del Golfo como escenario de grandes combates de boxeo.

Como todas las partes querían otorgar al combate cierta legitimidad deportiva, el CMB creó un cinturón de "campeón de Riad" para que el ganador pudiera lucir algo más en el ring que un enorme cheque.

A Fury se le vinculó con una paga de 50 millones de libras (60,6 millones de dólares) por la exhibición, mientras la prensa británica sitúa en 10 millones de libras el monto recibido por Ngannou.

El boxeador británico, apodado el "Gipsy King", tendrá un combate más serio en Riad en diciembre contra el ucraniano Oleksandr Usyk, que actualmente ostenta los otros tres títulos mundiales de pesos pesados.

"Voy a casa. He estado en el campo de entrenamiento durante 12 semanas", dijo Fury. "Me tomaré un largo descanso y veré qué es lo próximo", agregó.

Ronaldo y Eminem de público

Arabia Saudita ha organizado una serie de combates de alto nivel en años recientes, como "El choque en las Dunas" en 2019, el que Anthony Joshua recuperó su corona de pesos pesados de Andy Ruiz, o "Ira en el mar Rojo" el año pasado en Yeda, en la que Joshua perdió en decisión dividida contra Usyk.

Las autoridades del reino aseguran que el interés doméstico en el boxeo ha crecido en estos años.

Su objetivo es disponer de medio millón de boxeadores en Arabia para 2030 como parte de la promoción del deporte impulsada en la agenda de reformas del príncipe heredero Mohamed bin Salmán.

Contemplando en directo la pelea entre Fury y Ngannou había personalidades como el futbolista Cristiano Ronaldo, ahora en la liga saudita, o los raperos Kanye West y Eminem.

El combate del domingo marcaba el comienzo de la "Riyadh Season", una temporada de cuatro meses de conciertos y eventos deportivos para hacer el reino más atractivo a los turistas.