Tiembla el Bayern: el sorprendente dato del Real Madrid en cierre de semifinales
Real Madrid espera el juego de vuelta de las semifinales ante el Bayern.
El Real Madrid fue eliminado en una de las quince eliminatorias de la Copa de Europa, actual Liga de Campeones, en las que empató el partido de ida de visitante, en los cuartos de final de la edición 1990/91 por el Spartak de Moscú, siendo el cosechado en Múnich ante el Bayern el segundo precedente en semifinales, proclamándose campeón en el anterior.
De los seis empates del Real Madrid en las 32 semifinales que disputó antes de la visita al Allianz Arena, solamente uno se produjo en el encuentro de ida. Fue en el empate sin goles en el Etihad Stadium en la temporada 2015/16, que se decidió en la vuelta en el estadio Santiago Bernabéu por la mínima, gracias a aun tanto en propia puerta del brasileño Fernandinho.
El doblete del brasileño Vinícius para dar forma al empate a dos tantos del Real Madrid en casa del Bayern, corta una mala racha en semifinales tras caer derrotado en los tres últimos partidos de visitante en semifinales de la Liga de Campeones, ante Chelsea y en dos ocasiones frente al Manchester City.
En las seis semifinales en las que el conjunto madridista empató la ida, cinco en el Santiago Bernabéu y una en el Etihad, superó cuatro, proclamándose siempre campeón posteriormente, y fue eliminado en dos. En la temporada 1987/88 por el PSV, tras empatar 1-1 en el Bernabéy y 0-0 en Holanda; y en la campaña 2010/11 frente al Barcelona, cayendo 0-2 ante su afición y empatando a uno en el Camp Nou.
Frente a Manchester United en la temporada 1956/57, Inter de Milán en la 1965/66, Borussia Dortmund en la 1997/98 y Manchester City en la 2015/16, como último precedente y único en el que el empate de la ida no fue en el Bernabéu, siempre que superó las semifinales, el Real Madrid se acabó proclamando campeón del torneo de mayor prestigio a nivel de clubes.
Ampliando al resto de rondas de eliminatorias de la Copa de Europa, el equipo blanco empató en su historia en quince encuentros de ida a domicilio y superó catorce. Su único precedente malo fue en marzo de 1991, cuando tras empatar sin goles en Moscú, fue remontado el tanto tempranero de Emilio Butragueño en el Bernabéu por el Spartak, con doblete de Radchenko y un tanto de Shmarov.