Selección de México: Martino y el reto de enfrentar a Argentina en el Mundial

Gerardo Martino cumplirá 60 años el día de la inauguración del Mundial de Qatar-2022 y llega a la cita como cuestionado entrenador de México y con la paradoja de enfrentarse a su Argentina natal en la fase de grupos.

En su etapa como futbolista, el 'Tata fue un habilidoso conductor creativo que se metió en la historia de Newell's Old Boys con el récord de partidos oficiales (472) para el club de la ciudad de Rosario, del que fue 'patrón' del mediocampo por una década (1980-1990), además de pasar por Tenerife (España), Lanús, O’Higgins (Chile) y el Barcelona ecuatoriano.

Como director técnico, empezó su carrera en el modesto Almirante Brown de Arrecifes (segunda división argentina), pero el éxito empezaría a sonreírle cuando emigró a Paraguay y logró tres campeonatos al frente de Libertad, al que llevó a las semifinales de la Copa Libertadores-2006, y otro título al frente de Cerro Porteño.

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Su notable gestión en Paraguay le allanó el camino para dirigir al seleccionado guaraní. Bajo su dirección técnica, Paraguay clasificó al Mundial de Sudáfrica-2010 en el que trepó hasta los cuartos de final, cuando cayó  ajustadamente por 1-0 ante España, que luego sería el campeón.

Martino volvió a dirigir a Paraguay en la Copa América de Argentina-2011 y en su propio país llevó a los albirrojos a la final, que perdieron con Uruguay (3-0). Ese fue el punto final como seleccionador de Paraguay, con un saldo global de 24 triunfos, 24 empates y 23 caídas.

Martino volvió a Argentina para ayudar a su querido Newell's que estaba en grave crisis y en peligro de descender, para lo cual tomó el mando del equipo a finales de 2011 y lo condujo a ganar al título de la liga argentina en 2013 y a las semifinales de la Copa Libertadores.

Esa gran campaña llamó la atención del poderoso FC Barcelona, al que llegó a mediados de 2013, pero el 'Tata' se alejó luego de la primera temporada en la que obtuvo la Supercopa de España aunque perdió la Liga en la última fecha, en un ciclo escaso de festejos.

Poco después desembarcó en la selección argentina, en reemplazo de Alejandro Sabella tras el subcampeonato logrado en el Mundial de Brasil-2014. Condujo a la Albiceleste durante dos temporadas, en las que perdió las finales de las copas América de 2015 y Centenario-2016, ambas ante Chile.